El sigo XXI se caracteriza indudablemente por los asombrosos cambios tecnológicos que marcan nuestra era, pues es increíble pensar lo mucho que ha cambiado la era de la tecnología en comparación a hace apenas 20 años. Los avanzados implementos tecnológicos han invadido un increíble número de aspectos de nuestra vida cotidiana, desde la forma en que nos comunicamos, como nos desempeñamos, nuestro método de aprendizaje o hasta cosas tan simples como la forma de llamar nuestra atención. Por lo que no es de extrañar que el sector moda se haya visto invadido por lo último en tecnología, creando prendas que cambiarían el futuro de la moda.
La tecnología se ha involucrado en el sector moda desde hace ya varios años, sin embargo es apenas poca más de una década que la tecnología ha marcado un cambio significativo en la industria de la moda, pues hoy en día no sólo son las casas de moda las que buscan innovar en sus diseños por medio de propuestas tecnológicas, sino que las mismas compañías de la industria digital buscan llevar sus creaciones un paso más allá creando indumentaria futurista digna de ver en un filme de ciencia ficción.
Alexander McQueen fue sin duda alguna uno de los diseñadores de moda más impresionantes de nuestros tiempos, pues su constante búsqueda de la innovación así como su impresionante enfoque creativo le permitió crear algunas de las colecciones de moda más memorables de nuestra era, que en conjunto con sus implementos tecnológicos marcaría las pautas para el futuro de la tecnología en la industria de la moda.
En 1999 la joven promesa apostó por mostrar su perspectiva de indumentaria futurista con la entrada del siglo XXI, marcando una nueva era en la moda. Inspirando su colección en la humanidad en la inteligencia artificial, surgió uno de los momentos más icónicos de la historia de la moda, el performance en el que aquél vestido blanco con numerosas capas de tul que portaba Shalom Harlow fue rociado con pintura por 2 robots, creando una pieza de indumentaria única en tiempo real, denotando la fusión de dos eras.
Alexander McQueen fue un genio y ejemplo a seguir en cuanto a propuesta creativa se trataba y años más tarde lo volvió a demostrar cuando en el 2006 su colección otoño- invierno mostró en vivo un holograma tamaño real de la modelo Kate Moss, en la cual se le apreciaba levitando con bello vestido que se movía de forma hipnótica y casi celestial dentro de una pirámide de vidrio, un suceso casi irreal para el año en que se mostraba.
Siguiendo la línea trazada por el fallecido diseñador, para su colección primavera- verano del 2008, Diesel decidió implementar los avances de la era tecnológica llevando las profundidades del océano hasta su show, con la ayuda de la proyección holográfica que mostraba enormes medusas levitar armoniosamente sobre la pasarela al mismo tiempo que lo hacían los modelos.
Un par de años más tarde Burberry continuó con el excéntrico fenómeno como parte su pasarela de inauguración para las recientes tiendas de apertura en Pekín, mostrando un alucínate show que unía la realidad y la tecnología, mostrando a los modelos caminar por la pasarela al mismo tiempo que sus duplas caminaban en sentido contrario, al momento de encontrarse de frente ambas figuras chocaban entre sí con luminosos destellos que cambiaban en simetría el color de las prendas que portaban, dando como resultado una ilusión digna de un cuento de hadas.
Cuando se habla de tecnología en la moda no se puede dejar de mencionar al diseñador Hussein Chalayan, pues sus vanguardistas diseños sin duda nos hace imaginar con mayor precisión a donde depara el futuro de la moda.
En otoño- invierno del 2000, Chalayan mostró su reciente colección a través de la simplicidad interiorista, por medio de una habitación de paredes blancas, un televisor, una mesa y 4 sillas, sin embargo la simplicidad se desvanece con la entrada de 4 modelos a escena que comienzan a desarmar el forro de las sillas provocando la incógnita de los espectadores, para finalmente mostrar a aquellos forros como prendas versátiles, una quinta modelo hace su aparición para sorprender al público mostrando que aquella mesa era también una falda.En 2007 Chalayan marcó una nueva fase de la moda al mostrar prendas con nanotecnología incluida que creaban prendas que en base al movimiento daban como resultado indumentaria de carácter distinto al demostrado en un principio. Prendas que parecen tener vida propia.
En 2016 la propuesta fue un paso más allá al crear prendas que en medio de cientos de invitados entra en metamorfosis al mostrar un diseño de indumentaria que al ser expuesta al agua esta comienza a cambia hasta mostrar una pieza final de diseño completamente distinto al mostrado inicialmente.
Iris van Herpen por su parte es una de las diseñadoras excursionistas de la era tecnológica aplicada en la moda, pues Iris se mantiene inconforme en el estancamiento textil convencional, buscando siempre nuevas formas de innovación de materiales, de diseño y de patronaje, tomando la tecnología como su mayor aliado para la creación de sus colecciones.
Las propuestas de Iris van Herpen se mantienen con tal vanguardia que incluso uno de sus diseños fue incluido en la lista de “los 50 mejor inventos del 2011” nombrado por la prestigiosa revista “Time”, pues Iris optó por llevar sus diseños al siguiente nivel, creando un vestido a través de la impresión 3D, permitiendo explotar los límites de la imaginación.
Visita nuestro asrtículo “Queer fashion, el presente de la moda no tiene género”.
Iris van Herpen se mantienen en la constante búsqueda de técnicas y materiales no convencionales que puedan ser portados de forma estética, por lo que se mantiene a la vanguardia en cuanto a avances tecnológicos se refiere usándolos a su favor, corte laser, impresión 3D y nanotecnología son solo algunas de sus técnicas preferidas.
Algunos otros diseñadores se mantienen a la vanguardia tomando a la tecnología como un fuerte aliado para traer a la realidad su creatividad. Victor & Rolf decidieron tomar a este moderno aliado para crear una de sus colecciones más icónicas hasta el momento, primavera- verano 2010, que mostraba en sus pasarelas a modelos portando vestidos cortados perfectamente en líneas estéticas, logrados mediante corte laser.